Españoles por la fuerza y saqueados

NO HA ACABADO aún el año 2010 -está a punto de hacerlo- con el que concluye el segundo período establecido por las Naciones Unidas para la descolonización de todos los territorios del mundo. Territorios que son países de hecho pero siguen sometidos al dominio de naciones extranjeras. Estamos seguros de que la ONU ha iniciado ya los trámites correspondientes, o está a punto de hacerlo, para que en Canarias también se aplique la Resolución 1.514 del Comité de Descolonización de los Pueblos. Eso es algo que en justicia les corresponde a estas Islas porque Canarias es la colonia más antigua del mundo. Canarias no es territorio español. Los canarios no somos españoles. Canarias es una nación a la que le falta su estado y hay que concedérselo. El que siendo canario diga que es españolista o amante de la españolidad de esta tierra es un ignorante, un mal hijo de la tierra canaria o un español encubierto y repugnante. Respetamos a los españoles como pueblo digno (aunque es un pueblo que tiene su historia negra), pero dentro de su nación en el continente europeo, que es la única que tienen. Hasta las Islas Baleares deben ser independientes. Próxima al archipiélago balear está Malta, que como territorio es muchísimo menor en superficie y, sin embargo, es una nación debidamente representada en los foros internacionales. Por lo demás, Ceuta y Melilla son dos posesiones españolas situadas en territorio africano-marroquí, junto con Tetuán, Tánger y otras conocidas poblaciones magrebíes. Eso significa que ni Ceuta ni Melilla son ciudades españolas, aunque lo diga la Constitución española, sino marroquíes. Tampoco Canarias, volvemos a repetirlo, es territorio español porque está en ese continente africano, mucho más abajo y en pleno Atlántico.

En Canarias vivía tranquila una población aborigen hasta que llegaron los crueles españoles. A partir de entonces somos españoles a la fuerza. Lo somos por la fuerza de la invasión, del saqueo, de la esclavitud, de las torturas y de los atropellos que han cometido los españoles con los canarios durante estos casi seis siglos. El saqueo y la rapiña continúan hoy mediante la Agencia Tributaria. Por si fuera poco, viene Zapatero, celebra un Consejo de Ministros en la tercera isla y promete lo que no puede conceder. Y aquí nos dejamos embelesar. Y en Madrid, a una niña que debería desaparecer del panorama político por anticanaria y españolista, la engañan como a una indígena con unas migajas a cambio de lo mucho que se llevan los españoles de aquí.

Canarias sufre el dominio español y Tenerife más aun porque no sólo está sometida a la hegemonía de los peninsulares, sino también de los dirigentes políticos canariones. Un ejemplo lo tenemos en lo que está sucediendo con el escáner. En el puerto de Las Palmas se instaló directamente. Aquí ha tenido que salir a la calle una manifestación vergonzosa y vergonzante para pedirlo sin ningún resultado hasta ahora. Una manifestación en la que se ha visto (lo repetimos, qué vergüenza) a la Cámara de Comercio, al Cabildo, al Ayuntamiento de Santa Cruz y hasta a algunos "notables" de la Isla, todos ellos pidiendo de rodillas lo que en justicia nos corresponde. Una consecuencia más del colonialismo español.

No somos España, no somos España y no somos España. Que se enteren de una vez los amantes de la españolidad, los españolistas y españolistos y hasta los nacionalistas tibios. Y si estamos sometidos a España, lo es porque la Metrópoli cuenta con el poderío de las Fuerzas y de las policías, ambas, nobles y eficaces pero obedientes al Poder constituido. Un poder que llegó al Poder de forma tramposa. Sólo por eso debería retirarse su cabeza visible y dejar paso a nuevas formaciones.

Por cierto, ¿cuándo se cambia la ley electoral? ¿Cuándo habrá listas abiertas? ¿Cuándo desaparecerán las listas cerradas que han dado paso a toda la porquería política que padecemos y la que se pueda colar en el futuro? Volviendo al asunto que nos ocupa, pensar que estas Islas forman parte de España es de iluso. Realmente sólo pueden pensarlo los que no conocen la realidad del mundo. Estamos alimentando a la España continental. Muchos canarios no se sublevan pacíficamente contra la dominación colonial porque piensan -así se lo han hecho creer- que no podremos subsistir como país independiente o porque todavía creen que las Fuerzas dispararán contra los sublevados. Y no será así porque son nobles y llegado el caso estarán con el pueblo. Desde ya alentamos a las células que componen el tejido canario (células de origen guanche) y a los peninsulares y europeos que se han sumado a nosotros de corazón. A todos los procedentes del ius sanguinis e ius soli los alentamos a que empiecen a demostrar una actitud de resistencia pasiva frente al peninsular, de hostilidad y hasta de antiespañolismo, porque los españoles han sido y son crueles con nosotros, porque nos siguen robando y porque nos siguen amenazando con fusiles. Cuánto lamentamos tener que expresarnos de esta forma, pero España no da visos de ceder; de devolver lo que no es suyo. Lo que les robó a sus legítimos propietarios: la tierra canaria. Pero el traspaso de propiedades y de poder ocurrirá pronto y pacíficamente porque así lo quiere el pueblo, el pueblo canario, por supuesto.

Ya veremos si el pueblo permite en mayo que sigan en el Poder las autoridades tinerfeñas que tanto lo han traicionado. Autoridades que tampoco se mueven por incompetencia, egoísmo y ambición. Autoridades que no saben lo que es Canarias y lo que es España. Ni siquiera saben en qué mares estamos situados. La ignorancia es atrevida y perjudicial.

Hemos hablado en este editorial del doble sometimiento que sufre Tenerife: a los peninsulares y a los canariones. Una figura del canarión puro es un chulón capicúa; un individuo al que tenemos denunciado (y seguiremos denunciando) porque es uno de los causantes de los apuros de credibilidad de la justicia que se practica en Canarias. Incluso ha llegado a comprometer a una alta personalidad de dicho estamento. La ha liado (como dicen algunos, "la está viviendo") hasta el punto de que tal vez pierda su carrera profesional. Sin embargo, el chulón sigue tan campante y riéndose, hasta que lo encierren, de las personas dignas de Las Palmas y de Tenerife. Concretamente, de José Manuel Soria y de José Rodríguez. El "gran" que también defiende el chulón es una mentira absoluta. Nadie se ha atrevido a discutirle esto a EL DÍA con argumentos de peso. Y acabamos.

Insistimos en nuestro convencimiento de que 2011 será el año en el que se ponga en práctica la resolución 1.514 del Comité de Descolonización de los Pueblos. Si no es así, el pueblo español sabrá lo que debe hacer, de igual forma que sabe que no es español sino canario. Para colmo de la españolidad impuesta por la fuerza, tenemos la desgracia de que Zapatero no se va. Ha dicho que quiere seguir hasta el final de la legislatura. Otro año más soportando a la vergüenza de España en Europa y en el mundo. Y encima tiene el descaro de venir a Lanzarote igual o con más gastos que un virrey, gastando dinero público y distrayendo a las fuerzas de seguridad de otras necesidades. Todo ello para que los culichichis de su partido y los nacionalistas vayan corriendo a olerle el trasero. ¿Qué nacionalistas son estos, machos y hembras, u hombres y mujeres, si así es más políticamente correcto?